14 de Marzo de 2025
El presupuesto 2024 fijo como objetivo una meta de balance efectivo de -1,9% del PIB, sin embargo, el resultado del cierre del año arrojó como resultado un déficit efectivo de -2,9% del producto, completando una diferencia de $8.800.648 millones en 2024 entre ingresos y gastos.
El desvío de la meta se explica por una sobrestimación de ingresos fiscales en el diseño del erario, y una tardía reacción del Ejecutivo para implementar esfuerzos de contención de gasto.
Por el lado de los ingresos fiscales, estos fueron menores en US$4.300 millones respecto de lo estimado en la elaboración de la Ley de Presupuestos 2024, y US$3.000 millones por debajo de la última actualización presentada por el Ministerio de Hacienda en octubre.
Por su parte, el ajuste de US$800 millones al gasto público fue insuficiente para remontar el cumplimento de las metas de política fiscal comprometidas por el gobierno para 2024, y contempló una reasignación de recursos desde el gasto de capital (-US$1.800 millones) hacia el gasto corriente (+US$1.000 millones), con un efecto neto de -US$800 millones.